Pululando por facebook me encontré
esta foto con un escrito que decía: "Querida sociedad: no necesitamos ser barbies para ser preciosas!!". Como en otras ocasiones, sentí molestia, coraje y cabreo ante la imagen no sólo por la blancura y la "dulzura" de la fotografía, sino por el hecho de que a menudo intentamos reivindicar
otro concepto de belleza, cuando quizás a mí la belleza no me parezca un valor reivindicable, por su inherente asociación con lo "femenino". Quizás me interese desactivar esa asociación, quizás apueste más por la fealdad, lo no deseable, lo
non grato, lo abyecto... como lugar de enunciación y lucha. Así que comenté la foto, y aquí os dejo mi reflexión:
YO ES QUE NO TENGO NINGÚN INTERÉS EN SER PRECIOSA
Hace tiempo que llevo dándole vueltas a por qué me generan bastante incomodidad y cierto enfado este tipo de fotos, así que aprovecho para intentar sistematizarlo aquí. Hay diferentes razones:
1. Las corporalidades que se muestran son siempre del tipo "anuncio de dove": mujeres blancas, jóvenes, limpias, perfectamente insertas en la hegemonía higienista en la que vivimos (prueba de ello es la ropa interior blanca que mantiene bien tapadas las partes del cuerpo de las mujeres asociadas con la sexualisad, esto es, no provocativas, no putas, asexuadas), sin cicatrices, sin marcas, sin granos, sin pelos, sin tatuajes ni piercings, con todas las partes que se supone que tiene que tener un cuerpo, bien peinadas, sonrientes... vaya, chicas que encajan en la lógica de la "normalidad" impuesta. Pero qué pasaría si mostráramos a un ser abyecto, una "mujer" mutilada, no blanca, sin un ojo, con cicatrices, granos o celulitis, vieja, arrugada, gritando con una boca en la que se entreven algunos dientes podridos, dolorosamente marcada por su clase, etnificación o lugar en el contexto geopolítico... tan sólo con una de esas características ¿diríamos "olé!, así me gustan así las mujeres!" o "no necesitamos ser barbies para ser preciosas"?
2. Yendo más allá, el mismo concepto de belleza me parece peligroso para la lucha feminista. En la línea del lema "somos guapas, somos listas, militantes y feministas", el cual me conflictúa gritar, ¿necesitamos ser guapas y listas? Entiendo la alteración que con estos mensajes se quiere hacer de la definición de estos conceptos pero, ¿no sería más interesante destruirlos? que guapura o fealdad; listura o tontura fueran dicotomías rebasables, hechos indiferentes en nuestra identificación, en nuestro proceso de construcción de identidad... De ahí mi "yo es que no tengo ningún interés en ser preciosa". Que las "tontas" o "feas" no sólo fueran legítimas en la lucha y en el mundo y la vida en general, sino que apostáramos porque éste dejara de ser un dato relevante. Creo que el sobrejustificarnos sin alterar los sistemas de valor asociados a "lo femenino" contribuye a perpetuar el modelo hegemónico de género.
3. ¿Dónde nos colocan estas reivindicaciones? ¿Para quién somos guapas? En serio... ¿para nosotras? En teoría por supuesto, pero ¿no es posible que caigamos en el juego de seguir queriendo ser deseadas, heterodeseadas por otrOs? ¿No se cae en la trampa de que se nos designe (desde un afuera a partir del cual nosotras somos cosas a las que desear, a las que "respetar" o "violar", jugando con la declaración ésa de "las mujeres son como las leyes, están para violarlas" y su contraparte) y nos coloque en el lugar "objetuable" a la hora de desear o no? Y así se explicarían estos comentarios que generan imágenes como ésta, tipo "así me gustan a mí las mujeres, que haya donde agarrar"...
En fin, reflexiones de media noche...
Y reitero, yo no tengo ningún interés en ser preciosa, en "ser" para otros. Yo quiero ser, estar y devenir como me salga del coño y me dé la gana.